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Colapso posterior de mordida
La oclusión (relaciones de contacto entre los dientes), es un conjunto de fenómenos muy complejos en los que están involucradas tanto la dentadura como los huesos y músculos del aparato masticatorio. Cada diente tiene una forma y posición estratégica dentro de la oclusión de manera que las fuerzas al masticar recaigan correctamente sobre cada pieza dental. Así, se consigue mantener un equilibrio entre los dientes, labios y lengua.
El colapso posterior de mordida es una maloclusion del adulto y es la pérdida gradual del soporte posterior debido a una inadecuada inclinación axial de los dientes posteriores. Esto deriva en una transmisión inadecuada de las fuerzas masticatorias.
¿Cuáles son los signos que nos indican que existe un colapso posterior de mordida?
Si existe una alteración en la estabilidad oclusal, ésta será valorada mediante una valoración intraoral por parte del ortodoncista y un análisis de una radiografía panorámica donde se observará una inclinación hacia adelante de los dientes posteriores.
Existen varios motivos por lo que se puede generar un colapso posterior de mordida:
– Pérdida de dientes posteriores sin que sean reemplazados
– Cualquier alteración que provoque la pérdida o desgaste de la estructura dentaria como caries, bruxismo o fracturas.
– Pérdida de contactos interproximales.
– Enfermedad periodontal: pérdida del soporte óseo de los dientes.
¿Cómo se trata el colapso posterior de mordida? Antes de empezar un tratamiento con ortodoncia en el paciente adulto, el paciente debe tener muy buen control de higiene, con un mantenimiento periodontal riguroso que elimine cualquier indicio de inflamación. El objetivo del tratamiento de ortodoncia en adultos será volver a recuperar la posición inicial de los molares devolviendo así el soporte posterior perdido, es decir, el ortodoncista intentará enderezar los dientes volcados de forma que las fuerzas masticatorias recaigan correctamente sin producir daño. Tras finalizar el tratamiento de ortodoncia, se colocará una retención removible para mantener la posición de los dientes. En casos en los que el colapso posterior haya sido causado por la ausencia de una pieza no reemplazada, una vez finalizada la ortodoncia se procederá a la rehabilitación protésica de los espacios posteriores.
Recuerde que la dentadura no está formada por piezas independientes entre ellas sino que todos los dientes forman parte de un equilibrio y la pérdida de una de estas piezas supone un desorden y un desequilibrio tanto a nivel dental como de las demás estructuras que forman el aparato masticatorio.